Un par de meses atrás nos invitaron al lanzamiento de un nuevo celular con accesorios interesantes, llamados Friends. Sin embargo, después de ver los Mods del Moto Z, el nuevo celular de Motorola, llegué a una conclusión: aquéllos serían más divertidos, pero estos son, definitivamente, más útiles.
En las oficinas de Motorola de Vicente López, en un saloncito muy mono, espacio nuevo armado para la ocasión, la gente de Motorola Mobility (a Lenovo Company, por cierto), presentó el nuevo celular de Lenovo… digo, de Motorola.
Nuestro anfitrión, como siempre, fue Ariel Pérez, PR Manager for Argentina, México y Puerto Rico (sí, Puerto Rico, mirá vos…), acompañado por Valeria Fernández, Marketing Manager de Argentina.
Pero el que llevó la parte más concreta fue Martín Errante, Product Marketing Manager.
Martín empezó con una breve historia del celular, enfatizando en que los cambios se hicieron siempre sobre lo mismo, pero que esta vez los motorólidos quieren señalar un cambio de paradigma (¿qué?) y mencionó a Uber y a Airbnb como ejemplos.
“Buscamos algo lo más personalizado posible y participar en la toma de decisiones” señaló Errante, y agregó: “hoy en día los diseños son complicados, poco flexibles, poco integrados, y le tenés que permitir al consumidor que pueda tener lo que quiere. Para eso, la propuesta es Moto Z Play + Moto Mods: ser flexible en el hardware”.
Ahí queríamos llegar. El Moto Z es el nuevo fonito, que viene con procesador octa-core de 2.0 GHz, pantalla AMOLED Full HD 1080p de 5,5”, 3 gigas de RAM DDR4, procesador de 64 bits, cámara de 16 MP con foco láser, cámara frontal de 5 MP con ángulo de 85 grados, sensor de huella digital, hasta 45 horas de batería, Android Marshmallow “puro” (todo lo puro que significa agregarle apps propietarias que permiten provocar acciones según la posición o el movimiento del fonito) y cargador Turbopower, entre otras características.
Y además de todo, los Moto Mods.
Los Moto Mods son carcazas magnéticas que se adhieren al respaldo del celular y le aportan nuevas funcionalidades. Hay una batería suplementaria (Incipio Power Pack) con capacidad de 2200mAh; un picoproyector (Insta-ShareProjector) con autocorrección de deformación trapezoidaly tamaño de proyección de hasta 70”; parlantes JBL Soundboost, y (ahí es donde me puse a babear) una cámara fotográfica Hasselblad (¿quién no conoce las Hasselbad? No me vengas con Zeiss ni Leica) con zoom óptico x10 y formato raw. Y, como si esto fuera poco. La promesa de que los módulos serán compatibles con las próximas tres generaciones de Moto.
Pero además de todo, existen módulos libres para que terceros desarrollen otros módulos, previa certificación de Android y Google. Es un programa para desarrolladores con premios de hasta un millón de dólares.
A partir de una pregunta, Martín señaló las diferencias entre el proyecto Ara de Google (un celular modular discontinuado, dicho sea de paso). Ése estaba pensado para gente con conocimientos y, en cambio, éste, para consumidores.
Moto Z se lanza en noviembre.
Mi sensación es que esos accesorios de los que te hablé al comienzo de la nota, llamados “Friends”, apuntan más al entretenimiento que a otra cosa: cámara de 360°, anteojos de realidad virtual, una cámara “física”, auriculares Bluetooth y un reproductor de audio portátil Hi-Fi.
En cambio, me da la impresión que los Mods de Motorola apuntan más a la utilidad (por lo menos a mí me serían más útiles) y para mí ése es un valor apreciable.