(Por Rubén Borlenghi) La firma digital es un tema de moda en esta
parte del sur del sur desde hace años, pero ella y algunos conceptos
relacionados son aún más viejos en el Hemisferio Adinerado, perdón,
Norte. Lo interesante es observar que es la punta de un iceberg de
negocios para los proveedores. Y nada mejor que revisar el tema
escuchando a alguien que es bastante más que un vendedor de servicios.
A principios de octubre estuvo en Buenos Aires Rodolfo Lomascolo, CEO de ipsCA y VP para Iberia y LatAm de STS Group.
Rodolfo figura en la web de ipsCA como Socio Director General, pero más
interesante es enterarse de que es un argentino que hace 25 años está
en España, se graduó allá como Ingeniero Industrial, especializado en
mecánica, fundó IPS en el 95, una empresa de desarrollo que trabajó
entre otras cosas sobre Lotus Notes (nada menos) y en el 96 surge ipsCA
. Por si alguien le discute el tema de DNI electrónico, conviene saber
que dirigió el segundo congreso de DNI electrónico de España (2008) y
el mes que viene integrará el Congreso Internacional de DNI
electrónico. Lo cual no es raro, si aparece como responsable del Grupo
de Trabajo de DNI electrónico español desde 2006.
Semejante actuación continuada le da una terrible fluidez que le
permite saltar de un tema al otro, y así llegó al concepto de cómo
hacer más confiable el intercambio de archivos digitales. De allí a
hablar de la cadena de custodia de la prueba, eso que vemos en las
películas cuando ponen el arma del asesino en una bolsita de plástico,
hubo pocos pasos. Haciendo una analogía con lo anterior, explicó el
concepto de “encapsular un archivo digital, un documento, dentro de un
contenedor seguro”. Ese contenedor (que es otro archivo) se firma
digitalmente y se puede mantener la integridad de la cadena de
confianza, hasta el momento en que se presente esa prueba a una
autoridad judicial.
La emisión, gerenciamiento y archivo de la factura digital es otro tema
donde su empresa y sus representantes locales tienen ingerencia; este
año el tema de la firma digital de los contratos de compraventa de
granos apareció en algún titular (yo me acordé que desde 2008 algunas
cadenas de hipermercados locales/multinacionales tratan de tramitar
facturas digitales), pero según comentó Lomascolo, la adopción de estos
mecanismos es aún lenta.
Todas las explicaciones de Rodolfo, que tiene una indudable capacidad
pedagógica, me llevaron a pensar (y a preguntar) cómo andamos por estas
latitudes en esos temas. Y ahí apareció el “reinventar la rueda”. Nos
comentó que se encontró con interlocutores (privados y oficiales)
dispuestos a poner en funcionamiento software comercial o de código
abierto no muy cercano a los estándares que son práctica corriente en
Europa. Y no sólo de temas de compatibilidad se trata, sino de la
capacidad probatoria o la integridad de los contenidos documentales. Lo
cual no es poca cosa.
Recordemos que el software que licencia su empresa corre sobre
plataforma Punto Net, y muy recientemente se prepararon componentes en
Java que permitirían el empleo de sus aplicaciones en otros SO. Y
también habrá que recordar que su universo de clientes corre sobre
Windows en una tremenda mayoría.
Eso sí, él es muy optimista sobre el desarrollo de sus negocios en
otras zonas de América al sur del Río Bravo. Esperemos (por el éxito de
sus negocios) que la clientela no tenga los pies tan pesados como
algunas áreas de la justicia española, como lo menciona este titular de
Internautas.org: “La Justicia española es incapaz de autentificar un pen drive”.
Información que en una demostración de fair play, el propio Lomascolo
posteó en su blog personal. Les recomiendo la lectura del texto, y muy
especialmente las opiniones que vierten los abogados y los empleados de
la justicia. Y sobre la eterna pelea por la adopción de open source en
áreas gubernamentales, no quise hacerlo perder tiempo. Su base de
clientes trabaja sobre otra plataforma.